Tres meses después del Festival de Eurovisión 2024, aún siguen latentes las polémicas ocurridas durante la 68º edición del certamen europeo. Se trató de una edición polémica y convulsa que ha pasado a la historia como una de las más complejas, tensas y oscuras de su historia.
Con la mirada puesta en Suiza, país organizador del Festival de Eurovisión 2025, quien fuera directora del proyecto de Malmö 2024, Karin Karlsson, vuelve a recordar y valorar todo lo acontecido en la reciente edición. Reconoce el intenso trabajo en la organización del festival sobre todo por los problemas de seguridad durante el evento. Sin embargo, destaca los numerosos beneficios para la ciudad anfitriona.
Recordemos que Karlsson cuenta con experiencia en la organización del Festival de Eurovisión, ya que lo ha hecho en dos ocasiones, en 2013 y 2024. Karlsson subraya la importancia de abrazar el espíritu alegre e inclusivo del evento.
En una entrevista al medio suizo Blick, la responsable sueca ha hablado de las dos ciudades finalistas para ser sede del Festival de Eurovisión 2025, Basilea y Ginebra. Al mismo tiempo, ha detallado los puntos que considera primordiales a la hora de organizar el certamen europeo, sobre todo, en temas de seguridad, turismo y elección del recinto.
Karin Karlsson: “Es importante presentar un proyecto con visión, no solo ideas simples”
Karin Karlsson reconoce que los responsables del proyecto de Ginebra se pusieron en contacto con ella para preguntarle sobre experiencia.
La responsable sueca afirma que, para obtener la licitación, además de los aspectos financieros, es importante presentar una visión, no sólo ideas simples. En su opinión, hay que concretar por qué el Festival de Eurovisión tiene que celebrarse en una ciudad y no en otra.
Por ello, un punto decisivo es la negociación con la emisora anfitriona. De esta manera, las ciudades deben intentar presentar algo que pueda atraer la atención del comité. “Existen algunas obligaciones para la ubicación anfitriona, pero eso no significa que no podamos negociar con la televisión pública”, añade.
Karin Karlsson afirma que los proyectos deben estar protegidos por un amplio equipo de profesionales “en el que puedas confiar e invertir tiempo para que dé sus frutos más adelante”.
“La primera vez que organicé Eurovisión, muchas cosas no estaban claras, ni para nosotros ni para la emisora. Cuando conseguimos el contrato en 2013, Suecia llevaba más de 20 años sin organizar el festival. Nos llevó mucho tiempo entender cuál era nuestra misión”
Karin Karlsson
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El papel de la ciudad sede: es necesario “crear un mundo eurovisivo”
Para Karlsson, que una ciudad apueste por un recinto de menor tamaño no es una desventaja. De hecho, compara cómo la propuesta de Basilea es más pequeña que la de Ginebra, situándose al mismo nivel que el Malmö Arena. Sin embargo, las dimensiones de recinto solo influyen en el número de entradas que se quiere vender.
De cualquier modo, el objetivo de la ciudad sede deber ser “crear un mundo eurovisivo” que permita tener a poca distancia los puntos clave del evento, como aeropuertos, hoteles y, por supuesto, el recinto.
La sueca destaca que a Malmö viajaron personas de 80 países diferentes, algo que demuestra la universalidad del Festival de Eurovisión. Con la organización del certamen europeo en 2013 y 2024, Malmö consiguió mostrar sus valores y consiguieron “ponerlo en el mapa mundial por un tiempo”, en palabras de Karlsson. Sin embargo, reconoce que la experiencia extraordinaria de 2013 no se repitió en 2024: “Muchas cosas resultaron diferentes a lo que esperaba”.
“Me sentí muy orgullosa y feliz de que Malmö fuera seleccionada nuevamente. Después del primer certamen en 2013, estaba realmente cansada. Pero luego me di cuenta del enorme privilegio que era también”
Karin Karlsson
Los desafíos en seguridad dentro del Festival de Eurovisión
A las ciudades suizas finalistas, les aconseja que presten mucha atención a todas las cuestiones relacionadas con la seguridad. “Cuando fuimos elegidos para acoger el festival, no sabíamos que el nivel de terrorismo en Suecia aumentaría y que todavía no había guerra entre Hamás e Israel. Esto trajo muchos desafíos”, añade. De hecho, el coste en seguridad se disparó, haciendo aumentar el presupuesto que previamente se anunció.
Recordemos que la propia Karin Karlsson reconoció a finales de mayo que había sido una edición “costosa” en términos de seguridad. En aquel momento, los responsables de la ciudad sueca no avanzaron cifras. Sin embargo, posteriormente se conoció que 1.500 policías asistieron al evento con el objetivo de mantener la seguridad en el Malmö Arena y su entorno. Así, la inversión en seguridad alcanzó los 22 millones de coronas suecas, o lo que es lo mismo, casi dos millones de euros (1.939.184,46 euros).
Esta cifra ha sido muy superior al presupuesto en seguridad que tuvo Malmö 2013 cuando la ciudad dedicó 5 millones de coronas suecas (unos 427.465 euros).
Karin Karlsson da más cifras. En esta ocasión, en referencia al coste de la seguridad dentro de las fuerzas de seguridad y los cuerpos desplegados. Concretamente, las autoridades policiales gastaron unos 100 millones de coronas suecas (unos 8.735.341,86 euros).
Sin embargo, aún no pone cifra oficial a la inversión definitiva de la ciudad de Malmö, aunque considera que es “es significativamente menor” a lo que se espera. Sin embargo, reconoce que se gastó mucho en seguridad.
Como ejemplo, Karin Karlsson destaca que en 2013 pudieron organizar el Eurovision Village por todo lo alto y llevaron a cada rincón de la ciudad el espíritu eurovisivo. Sin embargo, la crítica situación vivida este 2024 por la polémica presencia de Israel impidió la celebración planteada.
“Tuvimos que planificar cuidadosamente con antelación y trasladar los eventos al interior para tener más control. Así que no fue sólo una fiesta feliz e inclusiva. Al contrario, quedó atrapada en el torbellino de la política mundial”
Karin Karlsson
En opinión de Karin Karlsson, los desafíos en seguridad también llegaron desde la red. Por ello, afirma que le “sorprendería que Suiza no sufriera también ciberataques”. Liverpool 2023 también tuvo que hacer frente a ciberataques, que, según Karlsson, “no sólo están relacionados con la guerra en Ucrania, los ataques proceden de Rusia, Irán y Corea del Norte”.
Haciendo balance de su labor en Malmö 2024, considera que el plan de seguridad tuvo su efectividad, a pesar de las críticas recibidas por ser demasiado herméticos.
“Pasaron muchas cosas durante este período, los músicos fueron acosados y algunas personas tuvieron miedo porque se elevó el nivel de alerta terrorista. En Suecia no estamos acostumbrados a esto. A esto se suma el miedo a los ciberataques y la desinformación”
Karin Karlsson
En palabras de la responsable sueca, estos ataques cibernéticos no se pueden remediar, pero si controlar mediante un plan de seguridad. Para ello, es necesario un grupo de ciberdefensa junto a una unidad especial dedicada exclusivamente a frenar estos ataques. “Pese a todo, el riesgo cero no existe”, añade.
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Klarsson considera Eurovisión como “una celebración de la democracia” y un motor del turismo
A pesar de todo ello, Karin Karlsson considera que el Festival de Eurovisión 2024 “fue una celebración de la democracia. La gente de la ciudad está muy orgullosa de que hayamos podido tener manifestaciones y una gran fiesta al mismo tiempo”. Sin embargo, a nivel turístico y económico, las valoraciones son otras, aunque mantiene que fue “una victoria para Malmö”.
“Quizás no haya sido un éxito turístico tan grande como hubiéramos esperado. Pero hubo otra victoria, mucho más importante: la de la democracia”
Karin Karlsson
Estas declaraciones se unen a las pronunciadas pocos días después de la gran final de la 68º edición del certamen, donde Karlsson sostenía que pasará algún tiempo hasta que Malmö vuelva a organizar la competición. “Creo que Malmö se tomará un descanso de Eurovisión por un tiempo. Está claro que queremos volver a hacerlo, pero si ganáramos en 2025, supongo que no estaríamos en el grupo que solicita Eurovisión”, afirmó.
Por tanto, se dejó sobre la mesa la posibilidad de que no volverán a postularse para albergar el Festival de Eurovisión en un futuro cercano después de un año “tenso”.
Malmö hace balance tras un complicado festival: “Nos tomaremos un descanso de Eurovisión por un tiempo”
El aspecto turístico es un pilar fundamental de cualquier ciudad sede del Festival de Eurovisión. Aunque en 2024, Malmö no pudo aprovechar el potencial del evento, espera que cualquiera de las ciudades suizas aspirantes pueda fortalecer este aspecto.
Pasado el tiempo, el legado de ser sede del festival es evidente. Sin embargo, para valorar lo que ha supuesto Malmö 2024 es aún difícil ya que sólo han pasado tres meses. De 2013, Karlsson reconoce que más de diez años después, el Malmö Arena se ha convertido en un recinto referente para espectáculos. Sobre 2024, no es muy clara, pero cree que “también tendrá un efecto positivo a largo plazo”.
La valoración final aún está en marcha y no se conocen los resultados. Sin embargo, avanza que será un buen valance en el que no habrá déficit. Se espera que, a finales de agosto, la ciudad de Malmö publique el informe global de su inversión en la 68º edición del festival.
La influencia política en el Festival de Eurovisión
La influencia de la política en el Festival de Eurovisión es, en palabra de Karlsson, evidente. Sin embargo, no lo acota solo al certamen europeo, poniendo como ejemplo los Juegos Olímpicos. Por ello, defiende que el certamen siga trabajando en la senda de mantenerse como un evento apolítico. Ante todo, destaca, que es una competición musical capaz de crear grandes éxitos globales.
“Es un concurso de música. Muchos políticos que dicen que el Festival de Eurovisión es política o que sólo sirve a la comunidad LGTBIQ+. Sin embargo, no saben lo importante que es la competencia para la escena musical. Eurovisión puede crear éxitos globales”
Karin Karlsson
Para finalizar, de cara al Festival de Eurovisión 2025, Karin Karlsson espera que el evento se desarrolle sin sobresaltos. Reconoce que organizar el concurso es difícil “pero muy divertido”.
De hecho, Karlsson espera asistir al evento en Suiza. “A Suiza vendrá gente tranquila, divertida, amigable y creativa. Todos serán bienvenidos, desde los más pequeños hasta los más mayores. Espero que lo disfruten”, concluye.
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Eurovisión 2025: La vuelta al origen del festival
Nemo fue le ganadore de Eurovisión 2024 con un total de 591 puntos, tras arrasar en las votaciones del jurado nacional y quedar en 5ª posición en televoto, consiguiendo el récord de ganar el certamen tras quedar en 5ª posición en el televoto. Su victoria le convierte además en le primer representante no binario en llevarse el micrófono de cristal de Eurovisión.
La victoria de Nemo devuelve el certamen de Eurovisión a Suiza 36 años después de la última vez, la tercera en la historia, tras haber conseguido la victoria con Celine Dion en 1988 y en 1956 con Lys Assia, en la primera edición del certamen celebrada también en Suiza.
El certamen europeo tras una edición muy polémica volverá a sus orígenes para celebrar la que será la 69ª edición de Eurovisión, que tendrá lugar el próximo mes de mayo de 2025 en Suiza, y cuya sede y fechas se darán a conocer el 30 de agosto.