El pasado 5 de diciembre la UER anunciaba la lista de países participantes de Eurovisión 2024 con 37 participantes, pero con una gran novedad: dejaba la puerta abierta a uno más: Rumanía. Reconocían conversaciones con la TVR, televisión pública rumana, para su participación para este año, donde las negociaciones han llegado a buen puerto y tendremos a Rumanía el próximo año en Malmö.
Rumanía dice no a Eurovisión 2024: 5 votos en contra, 4 abstenciones y 4 a favor de ir a Malmö
La decisión se debatía hoy y finalmente el Consejo de Administración ha decido que Rumanía no estará presente en Eurovisión 2024. Los votos del Consejo de Administración de la TVR, televisión pública rumana, han quedado de la siguiente forma: 5 votos a favor de no participar, 4 abstenciones y 4 a favor de ir a Malmö.
En la reunión de hoy además se han aprobado los presupuestos de 2024, donde según la propia TVR no tienen fondos suficientes para Eurovisión 2024, remarcando “los estándares” cada vez más elevados. Cabe recordar que Grecia hizo pública ayer su cuota de participación y era inferior a la de 2023.
Los presupuestos contemplan otras partidas con los Juegos Olímpicos de este mismo año en Paris, la continuación del proceso tecnológico, automatización de los canales, inversiones en el sistema de producción de noticias, continuación de las inversiones en la nueva sede de TVR Craiova y otros proyectos de modernización largamente retrasados, los cuales, son más prioritarios que participar en el Certamen musical más importante de Europa.
El camino de Rumanía a Eurovisión 2024
Rumanía acabó Eurovision 2023 llena de polémica, su representante Theodor Andrei con la canción «D.G.T. (Off And On)» se marchó de Liverpool con un doble cero de jurado y televoto, además de las malas críticas de prensa y de todo el mundo eurofán, donde nadie entendió como un país podía estar representado de esta manera tan dejada y descuidada.
Además de la situación económica de su televisión pública, el bajo interés por el certamen en el país es una realidad, la preselección que coronó a Theodor ganador, marcó mínimo histórico con solo 137.000 espectadores, lo que supuso un paupérrimo 0.8% de audiencia con una pérdida de 31.000 espectadores en comparación con 2022.
Incluso el propio ente público sometió a una votación popular la participación rumana, donde finalmente consiguió ganar el sí a participar en Eurovisión, con un debate posterior denostando la imagen del Festival.
Por si fuera poco a su vuelta a Rumanía Theodor concedió una entrevista al programa “The watcher” donde contó todo lo relacionado con su camino eurovisivo, dejando declaraciones que ayudan a entender la decadencia rumana. Puesta en escena con 80€ de presupuesto, no dejar al artista opinar nada de su candidatura o amenazas a la propia madre del cantante. Todo un sueño convertido en una pesadilla.
Sin embargo, la UER no quería perder a Rumanía y negociaba con ella su incorporación al Certamen del próximo mayo, ampliando el plazo de confirmación y adaptándose a sus necesidades. Recibiendo la propia televisión pública un plazo de tiempo extra para pagar la cuota de participación de Rumanía para Eurovisión.
Dichos esfuerzos no han dado su recompensa y Rumanía estará fuera de Eurovisión 2024.
Rumanía en Eurovisión: Varios terceros puestos y una descalificación
Rumanía participa en el Festival de Eurovisión desde 1994. Su mejor resultado han sido dos terceros puestos con “Let Me Try” en el 2005 y en el 2010 con el tema “Playing With Fire” interpretado por Paula Seling y Ovi.
Intentó debutar en 1993, sin embargo, no logró clasificarse dentro de la semifinal para países de Europa del Este, retrasando su debut hasta 1994, primera edición en la que participó de la mano de Dan Bittman y ‘Dincolo de nori’.
Desde entonces su carrera en el festival ha sido un camino de luces y sombras. Una mancha negra en el historial de Rumanía en Eurovisión fue en el año 2016 cuando debido a la deuda que arrastraba la TVR fue descalificada a tres semanas del certamen, por acumular una deuda de más de 10 millones de euros y no subsanarla en el plazo establecido.
Su mala racha y los problemas financieros de la televisión rumana se empiezan a notar especialmente desde 2018, primer año en el que no se clasificaba para la final desde que se reintrodujeron en 2004, y desde entonces en las 2 siguientes ediciones no ha conseguido su pase a la gala del sábado.
Por si fuera poco, el certamen pasa por una crisis de audiencia en el país en los últimos años, arrastrado principalmente por la crisis financiera y la audiencia que sufre la propia TVR, y que ha dejado Eurovisión en el país con menos de un 3% de audiencia, siendo el país en el que menos se sigue el festival.
En la edición de 2022, el país volvió a clasificarse a la final tras tres eliminaciones consecutivas en las semifinales gracias a WRS y su “Llámame”, aunque tuvo que conformarse con la 18ª posición de la gran final del certamen.
El año pasado el doble cero cosechado por Theodor Andrei fue la guinda a la gran crisis eurovisiva del país. ¿Será Mihai Traistariu su salvador este año?