Uno de los grandes misterios de Eurovisión 2024 está siendo la participación de Rumanía, la cual, a día 17 de enero aún no está clara. Algo preocupante, cuando el próximo día 30 de enero se sortea la ubicación de cada país en las semifinales y donde deberían de estar confirmados todos los países participantes.
La decisión de la participación de Rumanía se tomará el 25 de enero
Según el medio rumano Fanatik, han podido hablar con Dan Turturică, director de TVR, televisión pública de Rumanía. Y el cual, dice que este tema se debatirá y se someterá a votación el próximo 25 de enero, a 5 días del mencionando sorteo. Sin embargo, asegura tener el permiso necesario por la UER para esta dilatada decisión, en la que 13 directivos decidirán sobre el futuro de Rumanía en Eurovisión 2024 que se celebrará en la ciudad sueca de Malmö.
Como siempre, los temas argumentados para este retraso es la delicada situación económica del país, siendo la cuota de participación lo que menos le preocupa. Esta tasa, de 180.000€ podría ser pagada para la TVR, pero Turturică insiste en que tendría que añadir el coste de realizar una preselección nacional y los gastos de viajar hasta Malmö y los costes derivados una vez allí.
En total, unos gastos que en palabras del propio Turturică aumentaría el presupuesto de 180.000€ en “otras decenas de miles de euros, si no más” Pero dejando claro, que esa decisión no solo dependerá de él. Si no de los 13 miembros de la Junta Directiva que realizarán una votación abierta.
Por lo que tendremos que esperar unos pocos días más, hasta el 25 de enero por lo menos, para que Rumanía decida si será el país 38 de Eurovisión 2024 o nos quedamos con 37 países como el año pasado.
Nombres rumoreados para representar a Rumanía en Eurovisión 2024
El cantante Mihai Tristariu, que ya consiguió un cuarto puesto en 2006, enciende todas las alarmas asegurando en sus redes sociales que tiene el tema para devolver a Rumanía a lo más alto.
Según otro de los rumores eurovisivos es que una mujer sería la que defenderá los colores de Rumanía en una posible vuelta y varios medios rumanos señalan a Laura Bretan, una cantante soprano rumano estadounidense, la cual, ganó el Romania’s Got Tallent y quedó sexta en el Amercan’s Got Tallent. La cual, en medio de los rumore, rumore continuos con el país subió esta foto a sus redes sociales.
Theodor Andrei, contar la verdad para seguir vivo
Theodor Andrei se presentó a Liverpool con la canción «D.G.T. (Off And On)» y se fue de Reino Unido con el bochorno de un doble cero de jurado y de televoto. A su vuelta a Rumanía concedió una entrevista al programa “The watcher” donde contó todo lo relacionado con su camino eurovisivo, dejando declaraciones que ayudan a entender la decadencia rumana.
La entrevista empezó fuerte, ya que Theodor, por contrato no podía decir nada difamatorio sobre la TVR durante seis meses, relatando como pesadilla su experiencia en Eurovision, algo que para él siempre había sido su gran sueño. Desveló que, en la preselección nacional, cada artista se diseñaba su puesta en escena, sin ayuda de la televisión pública y con un presupuesto de 80€, donde hasta la guitarra era prestada.
Una vez ganó la preselección su infierno empezó. Ya en las fotos promocionales para la UER, todas aquellas que tenía la lengua fuera, se prohibieron sin ninguna otra explicación. Además, empieza a relatar que empezó a recibir un acoso brutal por parte de sus compatriotas y uno de los principales motivos era por llevar un traje rosa y la duda sobre su orientación sexual. Recordemos que Rumanía es un país altamente homófobo, es más, en la entrevista hay momentos realmente incómodos con este tema.
A la hora de proponer ideas para su puesta en escena de Liverpool, Theodor llevaba ideas a las reuniones, pero estas eran rechazadas por la TVR sin explicación alguna. Cuando le presentaron la puesta en escena, se quedó alucinado porque él tenía una visión completamente diferente de lo que quería mostrar en el escenario. Él quería empezar con una camisa de fuerza donde las bailarinas se la mancharan de negro, con una alegoría donde la camisa de fuerza era la sociedad que quería mantenerlo en su lugar. Además, quería introducir la lengua de signos.
La pintura fue rechazada por no manchar el escenario, entonces propuso un gran corazón para ser destruido, quería que su canción fuera algo más que un baile provocativo. Además, le dijeron que sus calcetines de Pikachu o Bob Esponja no eran adecuados que tenía que cambiarlos, algo que no aceptó.
Otro de los puntos álgidos de su pretemporada fue la discusión de la TVR si tenían que presentar una versión acústica de la canción «D.G.T. (Off And On)» o no. Una reunión que el propio Theodor fue excluido y en su lugar fue su madre, asegurando que él no colaboraba por tener ideas demasiado fijas. Donde se decidió que fuera acústica, el representante se negó de manera rotunda porque no le gustaba como sonaba, llegando al consenso de un 50% de la canción. La idea de la TVR es que tocara con un kimono negro y una guitarra con forma de mano, nuevamente Theodor se reveló defendiendo su traje rosa, donde le dijeron que sería el hazmerreír de toda Europa. Estas discusiones finalizaron cuando le dijeron que lo único que tenía que hacer era concertarse en cantar y que no opinara más, que un chico de 18 años no tiene experiencias para opinar.
A la hora del videoclip, Theodor le dijo que cuando iba a rodarlo, a lo que contestaron que no podían ayudarlo. Por lo que tuvo que costeárselo y hacerlo él solo, a escondidas del ente público rumano. Cuando lo finaliza lo enseña, parece que gusta, pero le prohíben publicarlo porque tiene elementos que van en contra de la UER como son la sangre o la camisa de fuerza. Intentó nuevamente debatir, peor la persona de la TVR le colgó el teléfono y él decidió publicarlo sin consentimiento de nadie. Esto provocó que llamaran amenazando a su madre sobre incumplir el contrato y sanciones de más de 400.000€, esta estaba visiblemente afectada y deseó que nunca hubiera ganado la preselección nacional.
Antes de viajar a Liverpool, vio el ensayo con figurantes y asegura que era aún peor que lo visto en mayo, ese video le dejó el ánimo por el suelo, video que tuvo que ver desde un móvil porque la TVR no le pasó el enlace. Le dijeron que no podía cambiar nada y que cantara bien.
Una vez en Liverpool dijo que realizó más de 200 entrevistas donde le dejaron solo, con la excusa de que tenían que ahorrar dinero. Donde no paraba además de recibir odio por todas partes, incluido por integrantes del gobierno rumano.
Rumanía en Eurovisión: Varios terceros puestos y una descalificación
Rumanía participa en el Festival de Eurovisión desde 1994. Su mejor resultado han sido dos terceros puestos con “Let Me Try” en el 2005 y en el 2010 con el tema “Playing With Fire” interpretado por Paula Seling y Ovi.
Intentó debutar en 1993, sin embargo, no logró clasificarse dentro de la semifinal para países de Europa del Este, retrasando su debut hasta 1994, primera edición en la que participó de la mano de Dan Bittman y ‘Dincolo de nori’.
Desde entonces su carrera en el festival ha sido un camino de luces y sombras. Una mancha negra en el historial de Rumanía en Eurovisión fue en el año 2016 cuando debido a la deuda que arrastraba la TVR fue descalificada a tres semanas del certamen, por acumular una deuda de más de 10 millones de euros y no subsanarla en el plazo establecido.
Su mala racha y los problemas financieros de la televisión rumana se empiezan a notar especialmente desde 2018, primer año en el que no se clasificaba para la final desde que se reintrodujeron en 2004, y desde entonces en las 2 siguientes ediciones no ha conseguido su pase a la gala del sábado.
Por si fuera poco, el certamen pasa por una crisis de audiencia en el país en los últimos años, arrastrado principalmente por la crisis financiera y la audiencia que sufre la propia TVR, y que ha dejado Eurovisión en el país con menos de un 3% de audiencia, siendo el país en el que menos se sigue el festival.
En la edición de 2022, el país volvió a clasificarse a la final tras tres eliminaciones consecutivas en las semifinales gracias a WRS y su “Llámame”, aunque tuvo que conformarse con la 18ª posición de la gran final del certamen.
El año pasado el doble cero cosechado por Theodor Andrei fue la guinda a la gran crisis eurovisiva del país.