El pasado fin de semana se celebró en Barcelona la primera edición de la “Barcelona Eurovision Party”, inaugurando la temporada de las preparties europeas. En esos dos días se dieron cita en la ciudad condal tanto artistas del actual año eurovisivo como leyendas de años anteriores, como las ganadoras del festival Conchita Wurst y Jamala, de 2014 y 2016 respectivamente. En las siguientes líneas os contamos en una crónica todos los detalles, imágenes y curiosidades de como fue esta primera preparty barcelonesa.
Viernes: photocall y llegada de los primeros artistas
La preparty arrancó el viernes en el lujoso hotel ME de Paseo de Gracia, donde tuvo lugar el photocall con algunos de los artistas invitados y las autoridades patrocinadoras del evento. Debido a las inclemencias meteorológicas y al tráfico algunos artistas demoraron un poco su aparición delante de las cámaras de medios locales y autonómicos como el Diari de Barcelona o TV3, nacionales como RTVE y Mundo Deportivo e internacionales como Wiwibloggs, Eurovoxx o L’Eurovision au Quotidien.
El primero en aparecer por la alfombra “rosa” fue Giuseppe Di Bella, bailarín de Edurne en Eurovisión 2015, que ejerció como maestro de ceremonias junto a la drag queen Sharonne en la gala del sábado. Los siguientes fueron los míticos Sunstroke Project, representantes de Moldavia en 2010 y 2017 y Marta Roure, la primera representante de Andorra en 2004 con “Jugarem a estimar-nos”, primera canción cantada en catalán en el festival.
Los primeros representantes de este año en posar frente a las cámaras fueron los Subwoolfer. Los “lobos noruegos” hicieron su aparición con su característico atuendo, siempre en silencio (hablando a través de un portavoz) y metidos en ese misterioso papel. A continuación llegaron los We are Domi (Rep. Checa), Ronela Hajati (Albania), WRS (Rumanía), Monika Liu (Lituania) y Vladana (Montenegro) que atendieron amablemente a los medios.
Entre los representantes de este año también se fueron intercalando las apariciones de los portavoces de Moroccanoil, del departamento de Turismo del Ayuntamiento de Barcelona y demás artistas invitados de otros años como Senhit y The Roop, ambos de 2020 y 2021.
Para el final dejaron el mejor momento y el que más expectación e interés generó entre todos los medios ahí presentes: la entrada de Chanel. La representante española de este año que lucía un bonito vestido brillante plateado, posó en primer lugar sola, a continuación con su equipo de bailarines y por último con Maria Eizaguirre, directora de Comunicación y Participación de RTVE, Oriol Nolis, Director de RTVE en Cataluña, todo el equipo encargado de la candidatura y los organizadores de esta primera edición de la Barcelona Eurovision Party.
Chanel, que en ese momento no pudo responder a las preguntas de los medios, sí nos dio momentazos como el baile con la canción de Noruega de este año “Give that wolf a banana” emulando a los propios Subwoolfer junto a su equipo de baile. También fuimos afortunados de poder captar ante las cámaras el esperado encuentro entre ella y Ronela Hajati (Albania), que entre risas y buen rollo posaron ante las cámaras.
Por desgracia echamos en falta algunos representantes que por algún motivo u otro no pudieron asistir al evento como los letones Citi Zeni, la maltesa Emma Muscat y el esperado representante de San Marino, Achille Lauro, por el positivo en Covid de un miembro de su equipo. También faltó a la cita la irlandesa Brooke, que más tarde en el cocktail posterior nos contó que perdió su documento de identidad en el avión y no pudo llegar a tiempo al ser retenida por la policía hasta ser identificada. Esta surrealista situación generó muchas bromas en Twitter.
Fue precisamente en ese mismo cocktail posterior al photocall donde los artistas pudieron conocerse en un ambiente más distendido entre copas y exquisitas tapas de degustación ofrecidas por el catering del hotel. Todos los allí reunidos pudimos presenciar el gran ambiente que había entre todos y gracias al contenido subido en redes sociales pudimos también disfrutar de más momentazos como el baile de Chanel con WRS o con los Subwoolfer.
Sábado: rueda de prensa y concierto
El sábado la prensa fue citada a las 11 de la mañana en el hotel Apolo, donde fueron pasando los artistas a medida que podían para atender a los medios allí presentes, que en este caso eran incluso más que el día anterior.
Los artistas respondieron preguntas a los medios generalistas y también hicieron entrevistas personalizadas con los medios especializados en Eurovisión. En nuestro caso tuvimos el placer de contar un ratito con las representantes de Irlanda y Montenegro y con Emma Muscat de Malta, que llegó el mismo sábado por la tarde. Por el hotel Apolo también pasaron los artistas que el día anterior no pudieron venir como los divertidos Citi Zeni.
Las apariciones más esperadas fueron también las de Jamala y Rosa López, representante de España en 2002. Debido a la delicada situación de su país, la llegada de Jamala fue muy emotiva y se la pudo ver visiblemente emocionada durante toda la ronda de preguntas, portando la bandera ucraniana en todo momento. Rosa también generó mucha expectación y con su característico buen humor y buen rollo atendió a los medios allí presentes e incluso hizo bailar a los Subwoolfer al ritmo de “Europe’s living a celebration”.
Una de las últimas en llegar fue la representante española, Chanel que atendió muy amablemente a la prensa y no quiso desvelar muchos secretos sobre su puesta en escena en Turín. Chanel afirmó estar ilusionada con su futura carrera musical y contenta de poder actuar en casa, especialmente en la sala Apolo donde ella trabajó con 16 años.
El concierto arrancó a las 20.30h de la tarde con la emocionante actuación de Jamala que se llevó la ovación y cariño de todo el público y con la que aprovechó para dedicar unas palabras de apoyo al pueblo ucraniano. Acto seguido hicieron su aparición los presentadores de la gala Giuseppe di Bella y Sharonne que presentaron brevemente a Chanel y a la siempre presente Maria Eizaguirre. Chanel hizo corear al público un trocito de su “SloMo” y nos invitó a disfrutar de la gala.
La primera en actuar después de Jamala no pudo ser otra que Marta Roure, sirviendo de homenaje a esa primera canción en catalán en Eurovisión. Vladana de Montenegro fue la primera artista de este año en poner el pie en el escenario con “Breathe”. Al acabar la actuación la montenegrina comentó que entendía que una balada no era muy “festiva” pero que era un tema dedicado a los fallecidos por la Covid19.
La lituana Monika Liu fue la siguiente en sorprender con su sensual “Sentimentai”. A continuación llegaron los letones Citi Zeni con su divertido tema “Eat your salad” con el que, a pesar de los problemas técnicos por los cuales tuvieron que parar la actuación al principio y volver a empezar, animaron muchísimo al público.
Giuseppe y Sharonne volvieron al escenario y la drag queen nos sorprendió a todos con su increíble voz y un medley de varias canciones míticas del festival. Con los Sunstroke Project rememoramos su “Hey Mamma”, tema con el que quedaron terceros en 2017 y el mítico “Run Away” de 2010, tema que se hizo viral gracias al baile del “epic sax guy”.
La irlandesa Brooke nos hizo bailar con su “That’s Rich” y su “lluvia” de dólares. Emma Muscat presentó su nuevo tema “I am what I am” y los checos We are domi defendieron su “Lights off” lo mejor que pudieron a pesar de los evidentes problemas técnicos que sufrió la cantante.
Llegó el turno de Rosa López que nos hizo viajar al pasado con un medley de las mejores canciones de España en el festival de Eurovisión (que ya cantó en la gala del 60 aniversario del festival celebrada en Londres en 2015), en el que no pudo faltar su tan querido y coreado por el público “Europe’s living a celebration”.
Los lituanos The Roop cantaron tanto su tema de 2021 “Discoteque” como el de 2020 “On fire”, que no pudieron cantar en Rotterdam debido a la cancelación del festival. La siguiente fue la albanesa Ronela que no solo presentó su tema de este año “Sekret” sino que además nos sorprendió con otro tema muy bailable.
A continuación, tanto los noruegos Subwoolfer como el rumano WRS nos hicieron bailar con sus respectivos temas “Give that wolf a banana” y “Llámame”. La italiana Senhit también nos hizo vibrar con su “Freaky” (2020) y su “Adrenalina” (2021), y además nos maravilló a todos con un medley de canciones de Israel (“Golden Boy” y “Toy”) que ya escuchamos en su #FreakyTripToRotterdam en Youtube.
Finalmente, antes de la esperada aparición final de Chanel y después de abrir la fiesta con una ganadora del festival como Jamala, hizo su aparición otra ganadora, Conchita Wurst. Conchita, que desde hace ya unos años se hace llamar Tom, nos deleitó a todos con una versión diferente de su épico “Rise like a phoenix” y además cantó nada más y nada menos que 4 de sus temas, entre los que se encontraba su último single “All I wanna do”.
Por último llegó Chanel, que defendió maravillosamente su “SloMo” con un nuevo estilismo y rebosante de la energía a la que ya nos tiene acostumbrados. La cantante cubana, que más adelante nos enteramos por redes sociales que actuó justo después de que se le cayera una mesa encima, se llevó una ovación del público al acabar la actuación, que coreó “Ganadora, Ganadora”. Ante tal muestra de cariño por parte del público y su familia allí presente, Chanel se despidió emocionada y asegurando que lo daría todo en Turín.
Con esta actuación final se puso la guinda a un fin de semana repleto de emociones. Giuseppe di Bella y Sharonne despidieron la fiesta deseándole mucha suerte a Chanel en Turín y deseando que esta primera Barcelona Eurovision Party fuera la primera de muchas.