La temporada de preselecciones y anuncios oficiales para el festival de Eurovisión 2020 ha comenzado y es el momento en el de que cada país participante va publicando sus candidaturas para el certamen musical más seguido de Europa.
El último país en hacer publica su candidatura ha sido Lituania, el cual ha vuelto a apostar por utilizar el Eurovizijos Atranja bajo su nuevo nombre ‘Pabandom Is Naujo!’ para seleccionar la candidatura que les represente en Eurovisión 2020.
Este año la preselección lituana ha reducido el número de galas y ha obtenido mayor calidad a nivel de producción y sonido. Como es frecuente ha tenido gran presencia de ‘freak songs’, pero a su vez ha tenido un gran número de candidaturas correctas y decentes que ha hecho postularse como una de las mejores preselecciones en lo que llevamos de año, algo que no es muy frecuente en Lituania.
El ganador resultó ser el grupo The Roop con la canción ‘On Fire‘, una canción que partía como una de las grandes favoritas que gala a gala se fue ganando la confianza y los votos del espectador así como del jurado.
No era mi candidatura favorita de la final, pero si creo que es una justa ganadora. The Roop fue la candidatura favorita tanto del jurado como del tele-voto, el cual triplicaba en votos a la segunda clasificada a través de los mensajes y llamadas telefónicas.
El tema se ajusta a la música pop de consumo actual, influenciada por un ápice de vanguardismo en cuanto a su instrumental y escenografía. Una candidatura arriesgada pero puesta al día.
La canción comienza de manera tranquila pero con fuerza, dejando ver un crecimiento de la melodía y del instrumental en un escenario oscuro donde el vocalista viste de blanco. La segunda estrofa se deja notar con mayor énfasis y dinamismo para explotar en un instrumental tan original como arriesgado que deja entrever un aire de rareza y ambigüedad. Me gusta mucho porque dota la canción de arriesgo sin salirse del pop.
Uno de los puntos más destacados de la candidatura ajenos al instrumental es la sorprendente coreografía que personalmente dudo que a alguien le cause indiferencia ya sea para bien o para mal. El vocalista se arropa del resto de la banda para interactuar junto a ellos en este extravagante baile, el cual tiene movimientos muy definidos, limpios y visuales sobre el escenario, jugando con las sombras y las tonalidades pasionales como rojos y blancos.
Su voz en directo es bastante afinada y la actitud del grupo en conjunto y de cada miembro en particular suma a la candidatura en todos los aspectos.
Considero que se debería de mantener el concepto escénico de cara a Eurovisión centrándose en cambiar la realización y hacer un mayor desarrollo de los planos en cámara para dotar la propuesta de mayor dinamismo e impacto.Sobre todo deberían enfatizar los cambios de plano en las partes donde se juegan con las sombras o cuando el vocalista camina sobre el escenario formando imágenes más cercanas y menos generales del estadio.
Deseo la mejor de las suertes a la delegación lituana y confío en que conseguirá volver a la final de Eurovisión 2020.