La temporada de preselecciones y anuncios oficiales para el festival de Eurovisión 2019 ha llegado a su final y es el momento de que cada país comience a promocionar sus candidaturas de cara al próximo mes de mayo.
Grecia ha seleccionado a su representante en Eurovisión 2019 mediante una elección interna, buscando así la mejor propuesta mediante un diálogo directo de la delegación con el cantante interesado.
Katerine Duska representará a Grecia en el festival de Eurovisión 2019 con la canción “Better Love“, con la cual intentará conseguir el pase a la final del certamen, de la cual el año pasado fueron eliminados en semifinales.
Me parece que lo mejor que ha podido hacer Grecia es hacer una elección interna dado las polémicas surgidas a raíz de sus últimos intentos de finales nacionales. Además considero que la delegación griega se siente más cómoda trabajando a una sola ficha que a varias, y se nota en el resultado final de la candidatura.
Katerine Duska es una cantante indie de gran reconocimiento por el territorio de influencia griega inclusive por la expansión de la zona mediterránea, un género musical muy influyente entre los jóvenes de la actualidad y por tanto una buena baza para intentar incrementar la audiencia entre los sectores más jóvenes del país.
Para mí el factor fundamental en la candidatura griega es la voz de Katerine, la cual tiene una calidad propia de una diva del jazz negra y le hace una candidatura interesante y especial, bajo mi punto de vista. Además, la canción se ha centrado en el estilo musical de la artista, dejando atrás los’ petardeos‘ y los up-tempo que intenta conseguir Grecia cada vez que envía a una diva al festival. Esto me alegra mucho porque sus últimas candidaturas con una vocalista femenina que han intentado ser las reinas del pop me han resultado bastante forzadas y han acabado siendo una candidatura más en la final. Sin embargo esta canción tiene mucha esencia propia y espero que consigan transmitir toda esa esencia sobre el escenario.
Es una canción tranquila con influencias experimentales que bajo mi parecer aporta originalidad y novedad al certamen. No se centra en la voz, sino en el conjunto, cargado de simbolismos y mensaje. El puente final me parece una maravilla y me recuerda mucho al estilo de Florence & The Machine, el cual me gusta mucho también como estilo musical y conceptual.
Este tipo de candidaturas tan arriesgadas y novedosas pueden ser un arma de doble fijo, ya que necesitan de una escenografía simbólica y medida al detalle, algo en lo que Grecia últimamente escasea mucho. Si consiguen desarrollar un concepto de escenografía acorde al videoclip y a la canción sobre el escenario de Eurovisión auguro un posible top10 para Grecia además de una candidatura muy recordada en el certamen. Sin embargo si no son capaces de transmitir todo el mensaje mediante una realización minuciosa y detallada se pueden dar el batacazo y quedar olvidada entre la competencia.
Deseo a Grecia la mejor de las suertes y solo pido que la delegación trabaje a fondo en su puesta en escena. Tengo un halo de esperanza ya que este año la campaña de promoción de la candidatura griega ha alcanzado mayor número de preparties y de conciertos, entre ellas la ES-Preparty de Madrid.