Columna de Opinión Benidorm Fest

Primera semifinal BenidormFest: Las expectativas ardieron y las bragas llovieron

Orgulloso, emocionado y satisfecho, que estas palabras vengan acompañadas con preselección española parecía una utopía. El año pasado apuntaba maneras, pero este año acabó de arder por completo ¡Qué maravilla de gala la de anoche! Puestas en escena al nivel de cualquier preselección de Europa, buen sonido lo cual es casi milagroso (con sustito inicial), un ritmo ágil y, sobre todo, nueve propuestas que brillaron y que personalmente hicieron difícil elegir solo cuatro finalistas. ¡Viva y larga vida al Benidorm Fest!

Creo que por defecto eurofán montarse películas viene de serie, cuando escuchas en Spotify la lista del Benidorm Fest por vez mil trescientas cuarenta y dos en el día (no para, no para, no para) te conviertes en crítico musical, cantante, jurado y sobre todo en escenógrafo. Tu mente viaja y terminas viendo una cosa normal una puesta en escena en la que puedas meter un unicornio volando, dar tres vueltas y triple mortal y una hoguera en directo y si no eres Kirkorov tu problema puede ser monetary.

A estas puestas en escenas idealizadas, nos vemos influenciados por opiniones de mucho eurofán, de mucha filtración, de mucho “erudito” y queramos o no nos acaba salpicando. Pero clara-mente esta semifinal no ha sido así; porque llevamos con el “run,run” de que cierta propuesta estaba comprada la victoria y 1,2,3 Benidorm reventó.

Pero también es sincero y si alguien lee alguna columna anterior o en mi Twitter yo también tenía ideas preconcebidas y que antes de ver la semifinal intenté dejarme atrás, quería sorprenderme, ser lo más imparcial posible y creo que lo conseguí. Es más, los poderes de Aramis llegaron a mí y acerté los cuatro finalistas.

Quiero empezar aquell@s que se han quedado fuera de la final: Sharonne, Aritz, Sofía Martín, Meler y Twin Melody. ¡Gracias y gracias! estamos hablando de candidaturas que hubiéramos matado por tener en preselecciones de otros años, pero ahora mismo, el salto cualitativo de la preselección en España se nota y deja fuera buenas canciones. No son malas candidaturas, son maravillosas, pero el problema es que las hay mejores.

Cuando no llegar a la final, no significa perder

Sharonne nos ha dado una oda al mundo drag, un show que con aparecer en pleno prime time es una gran victoria ¡Brava! Sofía Martín nos traía un chicle de canción, la puesta en escena era super cuqui, pero aquí la falta de tablas penalizó; pero ella se ha dado a conocer en la industria musical española, “Tóxica” es un petardazo y lo petó en ventas, eso también es ganar Benidorm Fest. Meler, puro buen rollo, puro positivismo y una de mis grandes sorpresas, porque a mí me han gustado muchísimo, están fuera de la final, Pero ¿quién ganó el voto demoscópico? Ojalá su siguiente single se llamara así.

Twin Melody, otra grata sorpresa, han servido uno de los mejores directos vocales de la noche, con una actuación muy resultona y el guiño a TikTok maravilla pura y Aritz, no me escondo si digo que “Flamenco” estaba en mi bottom, pero su actuación me pareció que sacaba todo el potencial de la candidatura, y el baile con pirueta final incluida ¡Chapó! Es más, pensé que sería finalista casi seguro.

Pero ahí vemos el nivel de este Benidorm Fest, que apuestas tan buenas se tienen que quedar fuera.

Los cuatro super finalistas

De nueve candidatos solo podían alcanzar la gloria cuatro y para mí, personalmente, los clasificados son los justos y merecedores de serlo, han brillado en esta noche de tanto nivel. Empiezo con la candidatura que más me ha desconcertado: Fusa Nocta, creo que la gran favorita previa a los directos. Por lo avances ofrecidos en Twitter esperaba tonos rojos y azules, algo realizado como lo mostrado hasta ahora, entonces encontrarme algo diferente que me ha dejado descolocado, con partes que me vuela la cabeza y con otras partes que se me quedan más cojas. El directo consiguió salvarlo, defendiendo correctamente la canción y salvando los nervios de la primera semi, creo que en la final estará mucho mejor.

Agoney… ¡Ojito con Agoney! lleva esperando su momento desde hace cinco años y parafraseando a una grande de España “¡Ahora, me toca a mí!” La realización está milimetrada, la puesta en escena luce muchísimo y partimos de un punto que de cara a Liverpool es perfilar y mejorar algo que viene perfecto desde la preselección, algo que no paramos de pedir años y años en el reinado de Anthony y del señor “Sin montañas”. Por descontado el derroche de “vocals”, a mí en OT no me acababa de gustar porque veía su gran potencia, pero sin control ninguno llegando a molestarme a veces, eso lo ha corregido y su directo me sorprendió para muy bien… Mis expectativas ardieron.

Mi Alicia maravilla, que disgusto tengo con ella, pero creo que debo pedirla perdón, porque favorita personal que toco, favorita que me cargo. El jurado pensaba que iba a irla muy bien (acierto), pero en el demoscópico y en el televoto pensaba que del top 3 no salía y aquí las expectativas no ardieron, aquí me han pegado una ost*a con ellas. A mí ayer me emocionó, su manera de cantar, de transmitir, me pellizca el corazón y alguna lágrima salió anoche, “Yo quisiera” no ganará el Benidorm Fest, pero ganará mi corazón y Alice Wonder será una artista a la que siga a partir de ahora; y si eso lo ha conseguido con varias personas más es una victoria con cada una de las letras. Y lastimablemente puedo afirmar que en España Salvador o Jamala, nunca hubieran ganado una preselección.

Y para mí los mejores de la noche: MEGARA. Viendo un directo en Instagram suyo previo, dijeron que bajaramos las expectativas, no traían escenógrafo, vestuario creado por su tía… Pues lo siento, pero siendo mi top 2 mis expectativas cayeron en picado. Leyendo los comentarios de prensa se recuperaron algo y pensaba que lucharían por una cuarta plaza, pero los primeros 20 segundos de la canción mi cabeza estaba explotando y estaba manifestándome para que pasaran a la final. El directo es IMPECABLE, la puesta en escena es perfecta y el pack está tan cerrado y luce tan bien y competente, que si de mí dependiera con un lacito para Liverpool. Y espero que el sábado den la sorpresa, me agarro a ese clavo ardiendo por muy difícil que sea que suceda.

Las votaciones

Nuevamente unas ideas preconcebidas del año pasado nos hacían pensar que el jurado iba a bailar “tango” pero fijaté tú que no. Es más, creo que votó muy bien, discrepando algún puesto, pero nada escandaloso o susceptible a buscar tres pies al gato. La sorpresa vino con el demoscópico que votó como le salió del mismísimo. ¿Previsión con ellos? ninguna, el año pasado en semifinales votaron ganador a Gonzalo y en la final le dejaron último…

El televoto, el tercer elemento, no perdono el segundo robo a Alice, pero no todo el mundo puede tener el don del buen gusto. Pero donde sufrí es en la votación final, porque si Aritz hubiera ganado el televoto Megara se hubiera quedado fuera de la final, entonces este señor en vez de escribir esta columna se hubiera ido a Benidorm y el “Arde” de Agoney se hubiera quedado corto con mi reacción.

La gala y sus presentadores

La gala que empiece tarde no es culpa de RTVE, es culpa de la forma de consumir televisión en España que básicamente es un asco, personalmente yo la tele “normal” no la veo, no puede empezar algo a las 11 de la noche y acabar a la 1 de la madrugada (con suerte) porque al día siguiente al trabajo entras que pareces el nuevo extra de The walking dead.

La gala la abrió la diva entra las divas con la canción más “Diva” y con cambio de peluca como la reina que es. ¿El colapso que hubiera sido un tinte de pelo bicolor? A Sharonne se la cae la peluca antes de actuar…. Menos mal que Inés llevaba una de repuesto en caso de hacer falta.

Pero la gala en sí para mí no tiene un pero grande, quizás muchos chiquititos que podremos analizar el sábado; fue rápida, sin entretenerse, con los interval justos y necesarios. La versión de “Arcade” de Leo Rizzi me pareció una maravilla, lo cual tiene doble mérito en mí, ya que la ganadora de Eurovisión no acaba de gustarme en demasía. Y la actuación de Edurne fue resultona, escuchamos “Amanecer” (ieieó) 20 segunditos en riguroso playback y luego un medly de temazos de Edurne que hace que te preguntes porque eligió el tema que eligió cuando la representa como artista entre cero y menos uno.

El sonido no acaba de ser absolutamente perfecto, sufrimos todos al principio, pero no tuvimos psicofonías de ultratumba, pinganillos quitados o alguien gritando “esa música arriba porfavó”. Risas nerviosas aparte, fue un audio muy notable y es digno de agradecer porque disfrutas mucho las actuaciones y no sufres por los cantantes.

Los presentadores son un acierto, Roberto Vázquez a pesar de su “abrido camino” y del invitado inesperado que fue Alice “Cooper” me pareció un virtuoso del directo, no tenía tarjetones, pero no le hacían falta, seguro, tranquilo y cómplice con el público, no exagero que es el mejor presentador de los cuatro que hemos tenido en las dos ediciones del Benidorm Fest y me alegro de que se apueste por gente de la casa. Mónica es pura templanza, morritos y reina de crear silencios y de ser intensa, una siempre diva, nunca indiva, pero para eso es un animal televisivo para hacernos disfrutar como la gran profesional que es y darnos lo que queremos. Inés, me parece maravillosa, empieza atacadita y muy encorsetada, pero cuando consigue soltarse es pura frescura, humor inteligente y rápido, espero que lo que quede de Benidorm esté más suelta y nos regale momentos icónicos como lo es ella.

Una semifinal intensa, con una calidad de final perfectamente y que contra todo pronóstico me deja un sabor muy dulce en la boca, algún toque amargo se me cuela, pero en general muy contento con unos resultados con los que estoy de acuerdo con el 100%

Hoy cogemos un poco de aire, porque mañana tenemos la segunda semifinal, donde nuevamente vuelvo a estar perdido eligiendo a los cuatro últimos finalistas, pero ya sabéis qué #SerEurofanNoEsFacil, pero también es precioso poder sacar pecho por nuestra preselección nacional

¡Viva el Benidorm Fest!