La primera edición del Festival de Eurovisión tuvo lugar en 1956 y en ella participaron representantes de solo 7 países. En los últimos años, han llegado a concursar hasta 43 países, donde edición tras edición 26 de ellos compiten en la gran final con el objetivo de alzarse con el ansiado micrófono de cristal.
Actualmente, el certamen europeo es mucho más popular alcanzando un mayor tamaño y alcance a nivel internacional. Lo que no ha cambiado desde sus inicios es que impulsa las carreras de sus participantes. Defendiendo los colores de sus respectivos países, los artistas consiguen un escaparate único donde muestran su talento ante público y crítica.
Aquí te explicaremos cómo el Festival de Eurovisión cambia las carreras musicales de los artistas que deciden dar un paso al frente y pisar el escenario europeo ante millones de espectadores.
La clave sobre cómo Eurovisión cambia las carreras de los artistas
Para entender cómo Eurovisión cambia las carreras de los artistas, es necesario conocer su impacto en el mercado musical y televisivo. El festival europeo se ha convertido en un fenómeno tan grande y que despierta tanto interés que va más allá de ser solamente un espectáculo de música. Incluso este ha llegado a ser el enfoque de apuestas.
Muchas plataformas que, además de tener bonos de bienvenida para nuevos usuarios, cuentan con apuestas, ofrecen la opción de apostar por quién crees que ganará el espectáculo. En estas apuestas se ofrece variedad ya que hay varios mercados disponibles, entre ellos está el Top 5 o Top 10, el mejor de determinada región y otras muchas temáticas.
El hecho de que el Festival de Eurovisión esté disponible incluso en el mundo de las apuestas es una muestra de su popularidad. Esta es una de las claves por las que Eurovisión ha logrado impulsar a numerosos artistas. Cuando participan en el festival, tienen la oportunidad de aprovechar una exposición masiva lo cual puede aumentar su fama considerablemente en una noche ante millones de espectadores en un evento televisivo único.
¿Por qué Eurovisión es una plataforma global?
A lo largo de sus casi 70 años de historia, el Festival de Eurovisión se ha convertido en una plataforma global. La principal razón es que cada edición es seguida por millones de espectadores, con cifras que oscilan entre los 180 millones y 200 millones en todo el mundo.
Esto hace que haya muchas probabilidades de que las personas que ven el concurso se conviertan en seguidores frecuentes o hasta fans de los artistas que participan en él. Además del innegable interés televisivo, con la irrupción de Internet, el festival creó una extensa comunidad internacional de seguidores en todo el mundo, ampliando la visibilidad y las posibilidades de los artistas para convertirse en estrellas mundiales.
Llegar a quienes pueden convertirse en nuevos seguidores no es lo único que Eurovisión ofrece a sus participantes, sino también da acceso a los mercados internacionales. En ellos están incluidos los representantes de compañías discográficas. Estas siguen espectáculos como Eurovisión para identificar a artistas emergentes con los que puedan firmar.
Además de la exposición masiva que se tiene en Eurovisión, otros aspectos por los es de mucha ayuda para los artistas son los siguientes:
Demostración de las habilidades | Las actuaciones deben ser en vivo, lo que impresiona más a los espectadores y demuestra a las discográficas la calidad de los artistas. |
Transmisión internacional | El alcance de Eurovisión no se limita a Europa, sino que se extiende a países de todo el mundo, así que los participantes pueden llegar a convertirse en artistas internacionales. |
Posibilidad de hacer networking | Al participar en el festival, los artistas conocen otros cantantes, productores y compositores cuyas relaciones profesionales pueden ser beneficiosas. |
Historias de éxito de las ediciones de Eurovisión
Con lo que hemos dicho aquí ha quedado claro que, a lo largo de sus casi 70 años de historia, Eurovisión ha sido capaz de descubrir nuevos talentos catapultando al mercado internacional las carreras de muchos artistas. Sus historias muestran cómo se hace realidad el gran sueño de pisar un escenario internacional consiguiendo que su actuación en el festival europeo destaque. A continuación, detallamos los casos más famosos.
Julio Iglesias
Su participación marcó un antes y un después en su carrera musical, pero no todos los que han escuchado sus canciones saben que Julio Iglesias estuvo en el Festival de Eurovisión. El cantante concursó en la edición de 1970 que tuvo lugar en Ámsterdam (Países Bajos). Aunque no ganó, consiguió destacar con su 4º lugar convirtiéndose en uno de los grandes nombres surgidos del Festival de Eurovisión.
A pesar de no alcanzar el Top 3, la canción con la que participó, «Gwendolyne», se hizo muy popular tanto en España como en otros países. Por eso, Julio Iglesias la grabó en cuatro idiomas. Otros logros que ha alcanzado el cantante y que se deben en gran parte a que estuvo en Eurovisión son los siguientes:
- Se convirtió en un artista consolidado en España y Latinoamérica.
- Ha vendido más de 300 millones de discos en todo el mundo.
- Es un ícono de la música romántica popular incluso en la actualidad.
ABBA
Antes de participar en el Festival de Eurovisión, ABBA ya era una banda con un gran talento musical. Por esto, era muy conocida en Suecia, pero muy poco fuera del país. Sin embargo, esto cambió con su participación en festival europeo. Su participación tuvo lugar en 1974 en Brighton (Reino Unido) y compitieron con su éxito «Waterloo» lo que los llevó a ganar el espectáculo musical.
Después de su triunfo en el famoso concurso de música, ABBA alcanzó su objetivo: alcanzar la fama internacional. Gracias a ello, lideró numerosas listas musicales alrededor del mundo, como Estados Unidos, Canadá, Bélgica, Finlandia, Irlanda y España. Además, «Waterloo» fue elegida como la mejor canción de la historia de Eurovisión en 2005, con motivo del 50º aniversario del certamen europeo.
Las ventas de ABBA superan la increíble cifra de 380 millones de discos. Además, temas como «Dancing Queen», «Mamma Mia!» y «Super Trouper» siguen siendo cantados por seguidores alrededor de todo el mundo, incluso inspirando musicales y películas.
Olivia Newton-John
Olivia Newton-Jonh alcanzó la fama mundial gracias, en gran medida, a su participación en el Festival de Eurovisión. Lo hizo en la misma edición que ABBA en 1974. A pesar de no conseguir el triunfo, la artista quedó en un meritorio 4º lugar, al igual que Julio Iglesias. Con esto se convirtió en otra muestra de que el trampolín que ofrece el concurso no solo es aprovechado por los ganadores, también por el resto de participantes.
La cantante y actriz representó a Reino Unido con «Long Live Love» que, como dato interesante, no era su opción favorita. Su participación en el Festival de Eurovisión la ayudó a firmar contratos discográficos y cinematográficos. Sus canciones obtuvieron muchos reconocimientos, entre ellos cuatro premios Grammy.
Varios álbumes de Olivia Newton-John estuvieron en el primer lugar de Billboard 200. Lo mismo sucedió con cinco de sus sencillos dentro de la lista Billboard Hot 100. Unos años después de Eurovisión, la artista protagonizó Grease junto a John Travolta. En la película interpretaron uno de los temas más exitosos de la historia: «You’re the One That I Want».
Céline Dion
La edición de 1988 celebrada en Dublín (Irlanda) fue una de las más reñidas de la historia del Festival de Eurovisión. El triunfo se lo llevó Suiza con su representante Céline Dion. Aunque es canadiense, representó al país centroeuropeo con la canción «Ne Partez Pas Sans Moi». Con ella superó por solamente un punto a Scott Fitzgerald, el representante de Reino Unido.
Gracias a que su fama aumentó al participar en el concurso, logró vender 100 millones discos en la década de 1990. En toda su carrera, superó los 200 millones de discos vendidos lo que la hace merecedora del reconocimiento de la artista canadiense más exitosa. Entre las habilidades de Céline Dion está el poder interpretar sus canciones en diferentes idiomas, desde alemán hasta japonés.
Los beneficios de los que disfrutó Céline Dion al participar en el Festival de Eurovisión fueron muy variados. Gracias a su victoria, se hizo mundialmente conocida y pudo trabajar con compositores y productores internacionales, y por supuesto, ser escuchada globalmente por millones de seguidores.
Aunque han pasado más de 37 años desde que ganó el concurso, la cantante sigue siendo una de las voces más poderosas de la industria musical.
Måneskin
El grupo Måneskin ha sido uno de los ganadores más virales de las últimas ediciones del Festival de Eurovisión. Se alzaron con el triunfo representando a Italia en 2021, en el certamen europeo celebrado en Róterdam (Países Bajos). Es relevante mencionar que Måneskin ya contaba con una carrera sólida antes de su participación en este concurso. Entre los logros que ya había alcanzado están los siguientes:
- Participaron en X Factor Italia en 2017. A pesar de no ganar, consiguieron firmar un contrato con Sony Music.
- Contaban con dos álbumes: Il Ballo Della Vita y Teatro D’ira.
- Agotaron las entradas de la gira de presentación de su primer álbum y, en 2018, fueron teloneros de Imagine Dragons en Milán.
Tras arrasar en el Festival de Sanremo italiano, en el certamen europeo participaron con la canción «Zitti E Buoni». Su victoria en el concurso les dio una exposición mediática que se complementó con su viralidad en redes sociales. Su triunfo fue sorprendente, pues con los votos del jurado profesional obtuvieron 206 puntos. Sin embargo, el televoto fue determinante (donde fueron los más votados) y consiguieron sumar 524 votos.
El caso de Måneskin es muy interesante, pues con su talento y la carrera sólida que habían logrado crear previo a su participación en el Festival de Eurovisión no quedaba duda de que merecen su éxito. El concurso aceleró la obtención de su fama internacional.
Conclusión
Las historias de éxito incluidas en este post muestran que el Festival de Eurovisión ha sido un trampolín usado por muchos artistas para impulsar sus carreras musicales internacionalmente. Queda claro que participar en el certamen europeo no es garantía de éxito. Para beneficiarse de su difusión mundial, se tiene que aprovechar cada detalle de la exposición que este da para llegar a la audiencia global.