El Melodi Grand Prix vuelve a su antiguo sistema de semifinales: crónica de la Primera Semifinal.

Ayer sábado 11 de enero de 2020 se celebró la Primera Semifinal del Melodi Grand Prix 2020, evento con el que la Norsk Rikskringkasting, corporación de radiodifusión noruega más conocida por las siglas NRK, inauguró la preselección del país nórdico para escoger el intérprete y la canción que lo represente en Róterdam durante la retransmisión del Festival de la Canción de Eurovisión 2020.

Para conmemorar el sexagésimo aniversario de la primera participación de Noruega en el Festival de la Canción de Eurovisión, la organización del certamen consideró celebrar no solamente una Gran Final, como venía siendo costumbre en los últimos años, sino también un total de cinco semifinales previas para dar representación a las cinco regiones geográficas en las que se divide el territorio nacional.

El Sur de Noruega, o Sørlandet en el principal idioma oficial del país, fue la región representada en esta gala, la cual dio comienzo con un ligero retraso de unos pocos minutos respecto a su hora de inicio oficial, las 19:50 horas CET.

Kåre Magnus Bergh, Ingrid Gjessing Linhave y Ronny Brede Aase fueron los maestros de ceremonia que condujeron en todo momento la gala con divertidos toques de humor tanto en los sketchs pregrabados como en las conexiones en directo desde el H3 Arena Fornebu de Bærum.

Las instalaciones con las que contaba el estadio para la ejecución de la gala mostraban un escenario mayor con forma trapezoidal detrás del cual se encontraban unas estructuras lumínicas con forma de celdas y un considerable número de focos, y un escenario menor ubicado en la porción derecha y sobre el cual únicamente se posicionaban los presentadores.

Antes de dar paso a las actuaciones que amenizarían la gala, se llevó a cabo un sorteo aleatorio mediante extracción de papeletas para así asignar a cada una de las cuatro candidaturas que competían en esta Primera Semifinal en dos duelos.

El primer duelo contó con Geirmund y Lisa Børud. El primero de éstos, ataviado con una indumentaria oscura que le permitía mostrar sus numerosos tatuajes en los brazos, y acompañado en el escenario por dos hombres que tocaban los timbales, interpretó su épica canción “Come alive” con una imponente fuerza vocal y una característica iluminación rojiza que contrastaba con el oscuro aspecto general de la puesta en escena escogida.

https://www.youtube.com/watch?v=MgGcS-IZI44

Por otro lado, Lisa Børud optó para interpretar su tema “Talking about us” por una escenografía mucho más desenfadada, caracterizada por cómodas prendas en tonos azules claros tanto para ella como para sus cinco bailarines y por una coreografía realmente dinámica, la cual en ningún momento obstaculizó la demostración de la gran calidad vocal de la joven. Todo ello permitió que la artista se alzase como la opción más apoyada por la audiencia en este primer duelo.

https://www.youtube.com/watch?v=XaAzVkHyA3s

El segundo duelo contó con las propuestas de Kim André Rysstad y Raylee. El primero de ellos se mostró con una elegante chaqueta de color verde oscuro y múltiples insignias doradas sobre una plataforma redonda. La sencilla puesta en escena que acompañó a la interpretación de su canción “Rainbow” estuvo caracterizada por una cortina de hilos dorados y por efectos lumínicos que aparecían en los golpes más fuertes de percusión de la melodía. El resultado fue una actuación aceptable, aunque quizás carente de fuerza en comparación con la grandeza natural de la que podía presumir la versión de estudio del tema.

https://www.youtube.com/watch?v=ikF48Qrc3H8

Tras ello llegó la que, sin duda, fue la actuación protagonista de la noche. Raylee apareció en el escenario para interpretar su rítmica propuesta, titulada “Wild”, con un body de color beige, unas botas oscuras que superaban la altura de sus rodillas, y una larguísima trenza. Cuatro fueron los bailarines que acompañaron a la artista durante la ejecución de una más que potente y elaborada coreografía, la cual estuvo caracterizada principalmente por contener movimientos corporales que representaban los propios de diferentes animales salvajes. Una pantalla LED colocada detrás de las cinco personas presentes en el escenario reflejaba diferentes paisajes naturales, como un gran nacimiento de sol propio de un amanecer, o una noche estrellada en un árido desierto. Todo este cóctel fue justificación más que suficiente para que Raylee fuera la candidatura más votada por el público en este segundo duelo.

https://www.youtube.com/watch?v=SOkU3NyqJW0

Tras todo ello, llegó el turno en el que Sondrey, finalista directo del concurso escogido de forma interna por un jurado asignado para tal fin, pudo presentar su canción “Take my time” ante el público. El artista, engalanado con un traje de color rojo, interpretó su bailable propuesta de estilo disco acompañado por cuatro coristas y bailarines vestidos de forma muy similar al cantante. El golpe visual más efectista de la actuación estuvo representado por cinco micrófonos cuyos pies estaban iluminados con tubos LED de color azul fluorescente.

https://www.youtube.com/watch?v=666-8pcYRaQ

Antes de dar paso al duelo final, un vídeo grabado expresamente para el fin repasó varias de las propuestas más destacables y notorias de la historia del Melodi Grand Prix desde su edición de 1997.

Finalmente, llegó el momento en el que las dos candidaturas que resultaron ser victoriosas en los dos duelos anteriores tuvieron que enfrentarse en el duelo final. Éste sirvió para que Lisa Børud y Raylee volviesen a actuar y a someterse de nuevo a las votaciones emitidas por la audiencia del programa. Fue precisamente ésta la que alzó como vencedora de la noche a la segunda de estas dos candidaturas, convirtiendo a “Wild” en uno de los diez temas finalistas del Melodi Grand Prix 2020.

Siéntete completamente libre de dejar en los comentarios de esta crónica tu propia opinión acerca de las candidaturas que compitieron en la Primera Semifinal del Melodi Grand Prix 2020, de si la propuesta vencedora era la mayor merecedora de ello, de Sondrey y su “Take my time” como opción finalista directa del concurso, y del retorno de la preselección noruega a su antigua mecánica basada en varias semifinales que preceden a su exitosa Gran Final.

Eurovisión

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