Ha sido un año muy intenso para el británico Sam Ryder. Comenzó en Tik Tok en 2019, cantando covers de sus canciones favoritas, una faceta que aún mantiene tanto en redes como en sus conciertos. Tres años después, este 2022, fue elegido para representar a Reino Unido en el Festival de Eurovisión, consiguiendo la mejor posición para su país desde 1998. Y, ahora, acaba de terminar su primera gira europea.
Con 2 fechas en nuestro país, el pasado 9 de noviembre actúo en la Sala MON Live de Madrid, concluyendo así su tour por Europa. Dejó alucinando a todos sus fans que, aunque ya eran conscientes de su potente rango vocal, escucharlo en directo es otra cosa.
Los elegidos para telonear al cantante en su fecha en Madrid fueron los integrantes de la banda barcelonesa Penélope. Presentaron su segundo álbum de estudio ESTO ES UNA LOCURA, después de su estreno el 15 de septiembre.
Dos minutos antes de las nueve, el escenario quedó iluminado solamente por una lamparita de noche, a la espera de que saliera el artista. No tardó en salir, vestido con su característico traje de astronauta, y empezar con la primera canción, Tiny Riot, en la cuál señaló varias veces a la luz de la lamparita en frases como “in the darkness there’s a light”. La luz triunfando ante la oscuridad es un claro lema del cantante, y fue un mensaje que llegó a todos los presentes durante toda la velada.
Siguió cantando Whirlwind, dedicada para la gente que ha tenido la suerte de haber encontrado al amor de su vida. Era su primer concierto en la capital y agradeció en múltiples ocasiones todo el apoyo, añadiendo que era increíble pasar ahí la última noche de su tour europeo. Sam quería que cuando todo acabase hubiésemos sentido una conexión especial con la música y un intercambio de energía. Y se esforzó mucho por ello, teniendo mucha conexión con el público mediante juegos, coros, luces y movimientos de manos.
Hubo un momento muy especial antes de seguir con la tercera canción, pues Sam pidió permiso al público para grabarles coreando una de sus nuevas canciones para la promoción de su disco debut, titulado There’s Nothing But Space, Man. Su estreno estaba previsto para el 18 de Noviembre, pero este ha tenido que ser atrasado y finalmente verá la luz el 9 de diciembre. El cantante ha manifestado que espera con ansias que podamos escucharlo, pero que lo que más disfruta es tocar en directo delante de sus fans.
Somebody llegó y todo el público rugió, pues es una de la favoritas. Y, además, dio otra sorpresa con la canción Mountain: comentó que ama mucho este tema, pero que era demasiado tarde para incluirlo en el disco. Por otro lado, la que sí que pudo llegar al proyecto final es Deep Blue Doubt.
Antes de cantar el cover de You´re the Voice, de John Farnham, contó una anécdota de la primera vez que la tocaron en directo: no especificó en que concierto fue, pero para introducir el tema le dijo al público “la siguiente canción ni siquiera necesita introducción, porque todos os la vais a saber”, y después resultó que nadie se la sabía. Sam Ryder bromeó con ello, pero antes de empezar a cantar dejo claro que esperaba que aquí en Madrid fuera diferente, y que este tema fuese todo un éxito. Y así fue, pues la gran mayoría del público conocía la letra y coreó al unísono que el cantante.
Y, entonces, llegó uno de los momentos más mágicos de la noche. El pasado viernes 2 de noviembre Sam Ryder estrenó su nuevo single All the Way Over, para todas las personas que en estos momentos tengan alguna batalla interna y necesiten apoyo del espacio, y para que llegara a todos los corazones de la sala el cantante se bajó al público para cantarla en mitad de la pista, rodeado por las luces de los fans.
El concierto estaba llegando a su fin, y antes de hacer una pequeña pausa Sam nos deleitó con una versión en acústico de su tema More, incluido en su primer EP, y que también formará parte del “tracklist” de su primer disco. Al igual que Put a Light On Me, que acostumbra a cantar en la primera parte del concierto pero que para cerrar el tour la quiso dejar casi para el final, con su característico mensaje de buscar la luz cuando hay oscuridad que intenta atraparnos.
No podía faltar el recopilatorio de sus covers favoritas, otra de sus señas de identidad, de las canciones Everybody Wants To Rule The World, I Want To Break Free, September y The Way You Make Me Feel. Finalmente, Space Man, la canción que le otorgó el segundo puesto en Eurovisión y que le ha acompañado hasta aquí junto con todo su talento, concluyó la noche. “Esta canción va sobre ser astronauta” bromeó el cantante.
Sam Ryder dejó el escenario de la sala MON con una promesa de que pronto volverá, y dejando una huella en todos los espectadores sobre lo importante que es tener la luz siempre presente, algo que te acompaña siempre que escuchas sus canciones.
