Nueva época navideña, nuevo Festivali i Këngës. El certamen albanés retorna una vez más en época festiva como única preselección hasta enero—a pesar de los rumores de su posible retraso hasta enero debido a los terremotos de Durrës. Continuando las bases establecidas hace un año por un equipo de dirección renovado, la velada ha intentado mostrarse atractiva de cara a la audiencia albanesa y europea. No obstante, con una gala que rebasa las dos horas y solo diez canciones como parte de la competición, ha habido muchos discursos que han entorpecido el desarrollo de la gala.
Con un comienzo entorpecido media hora más tarde de lo previsto, toda la gala tendría un tema recurrente: los fallos de sonido. Tanto en las actuaciones como en las intervenciones de la presentadora se podía percibir un eco bastante notable que se cargaba cualquier intento de ambiente; y tampoco servía de ayuda la mezcla de sonido que hacía prácticamente desaparecer a la audiencia. Un mayor problema, no obstante, es cuando un micrófono deja de funcionar de manera súbita, algo que ocurrió más de una vez durante la gala.
Tras la apertura de Jonida Maliqi con el tema que le dio la victoria hace un año y más de diez minutos de introducciones y monólogos, pasamos a la primera actuación. En un principio se suponía que el dúo conformado por Nadia y Genc Tukiçi iba a abrir, como confirmaba el orden presentado hace una semana, pero por razones que desconocemos hubo cambios de última hora; por lo que arrancamos con Bojken Lako y “Malaseen”. Las postales siguen todas el mismo tema, no más de 30 segundos con los artistas bailando al ritmo de la versión instrumental de “Natural” (tema de Imagine Dragons); aunque pecan de poco interesantes su corta longitud ayuda enormemente a mantener el dinamismo de la gala.
Bojken, regular del certamen albanés, trae una de las candidaturas más interesantes con diferencia con una estructura muy experimental y un directo que reluce con la orquesta—otro de los temas recurrentes, la orquesta realzará la mayoría de canciones (a pesar de algunos fallos graves del director de orquesta; y algunos arreglos han sido bastante criticados). Le sigue Kanita, la primera de las favoritas, con su balada “Ankth”. Una actuación correcta, muy destacada vocalmente y en cuanto a interpretación que se planta como merecida favorita.
La serenata de Devis Xherahu continúa la gala como tercera actuación: con una letra genérica y un ritmo lento, sin destacar vocalmente pero sin fallos, a priori parece una candidatura bastante olvidable; la actuación ha tirado por los tonos marinos pero más allá de eso ha sido muy estática. Prosigue Aldo Bardhi con el uptempo “Melodi”. Con una serie de bailarines y un instrumental muy mejorado gracias a la orquesta, la instrumental ha sido el mejor elemento de la actuación con diferencia. Aldo, no obstante, no ha estado tan afinado vocalmente, con varios fallos graves a lo largo de la actuación y falta de estabilidad.
La primera gran favorita, Kamela Islamaj, pasa a tomar el escenario con su balada jazz “Më ngjyros”. El foco de la actuación fue claramente Kamela, quien con una interpretación y un directo vocal muy destacados se plantó como candidata a llevarse la victoria. No sin antes recibir la mayor ovación hasta el momento.
Pasado el ecuador de la gala y una pausa publicitaria es el turno de “Ju flet Tirana”, una balada interpretada por padre e hija Genc y Nadia Tukiçi. Con una actuación muy emotiva, mostrando constantemente signos de la cercana relación que tienen ambos y tratando también la diáspora albanesa (Nadia se crió en Japón con un padre albanés y una madre japonesa), es una de las interpretaciones más destacadas. No obstante, parece bastante probable que un jurado enfocado a Eurovisión la pase por alto.
Balada tras balada, Sara Bajraktari sube al escenario en séptimo lugar con “Ajër”. Contando tan solo con la voz de Sara, es una candidatura correcta pero que tampoco consigue destacar dentro del mar de canciones. Pasamos entonces a la favoritísima, Elvana Gjata, cuyo tema “Me tana” se ha convertido en tendencia en los Balcanes con varios millones de reproducciones en YouTube. La actuación busca claramente traer energía, optando por tonos rojos yuna gran cantidad de gente rodeando a Elvana, que realiza un directo vocal muy correcto. Es aquí que la orquesta se muestra más criticable, siendo un cambio radical con respecto a la producción del estudio al que se le pueden acusar varios fallos graves de arreglos. Asimismo, aunque lo consigue arreglar sin problema, al principio de la actuación todo el ambiente era demasiado plano y estático y corría el riesgo de aburrir.
Renis Gjoka en penúltimo lugar con “Loja”, una de las candidaturas más arriesgadas con una mezcla interesante de rock y electrónica. Actuación un tanto oscura, la orquesta realiza un gran trabajo con este tema lleno de energía que mejora exponencialmente con respecto al estudio. Quizás habría sido mejor que Renis se moviera más a partir del puente de la canción pero aun con todo es un pack a tener en cuenta.
Habiéndose cumplido hora y media de gala, a las 22:30, tenemos el primer intervalo de la noche. Cuatro exparticipantes del Festivali i Këngës interpretan un medley de temas antiguos del festival. Parece fuera de lugar dado que faltaba una candidatura por actuar y, al menos desde un punto de vista eurofan, poco interesante. Tras un pequeño homenaje al cantante albanés Luan Zhegu en el que se le entrega un trofeo con motivo a su larga carrera, estrechamente relacionada con el festival, finalmente llegamos a la última candidatura de la mano de una leyenda del certamen: Albërie Hadërgjonaj—quien logró la victoria en 1998. La actuación no parece muy destacable a primera vista, es nuevamente otra balada que depende de la voz del artista (que no tiene fallos notables).
Segunda pausa publicitaria y llega el invitado estrella, el representante italiano y vencedor del Sanremo Mahmood. Arrancando con una actuación sobresaliente de su último single, “Barrio”, tiene una pequeña conversación en italiano con la presentación Alketa. Entre otros, destaca el apoyo de Mahmood a todas las víctimas de los terremotos que llevan casi un mes asolando el país y el fomentar la actitud de no rendirse, poniendo como ejemplo su participación en X Factor en la que quedó eliminado en la primera ronda.
Para terminar su intervención, interpreta su tema más conocido, “Soldi”, de manera perfecta. En esta actuación, acercándonos al término de la gala, es la primera vez que vemos planos del público. Tercera y última pausa publicitaria y tenemos a tres actores con un diálogo satírico en el que cada uno toma el papel de un político principal en Albania—el primer ministro Edi Rama y otros dos líderes políticos. Llegando al cuarto de hora, la presentadora recuerda que los clasificados se anunciarán la noche siguiente y se despide.
En general, se puede decir que la gala ha tenido un transcurso muy enrarecido con cambios bruscos de tener un ritmo muy rápido a estancarse durante varios minutos y parece probable que siga así en la semifinal de esta noche contando con la misma estructura; en cuanto a dinamismo es seguro decir que el formato de semifinales del año anterior, con todas las canciones siendo interpretadas en las dos galas pero de maneras distintas, era mucho más favorable. Parece evidente el esfuerzo de los guionistas y productores de llegar a un punto parecido con la mitad de actuaciones.
¡Esta noche se emite la segunda semifinal! Todos los detalles están disponibles en este artículo y mañana, también al mediodía, publicaremos una crónica similar.
Recuerda que aun estas a tiempo de votar por tu candidatura favorita en nuestro sondeo a continuación: