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«Prometía tan bonito cuando nos conocimos…»

La segunda semifinal del Benidorm Fest 2024 estuvo cargadas de expectativas no cumplidas a través de los resultados

Llegado el momento no sé si será la falta de sueño, la resaca emocional, la intensidad con la que vivo el Benidorm Fest, si las expectativas son una puta mierda o realmente es normal sentir la sensación de decepción. Es como me siento y os voy a abrir mi corazón, un corazón que ahora mismo está con mucha pena y no estoy exagerando ni un poquito.

Partimos de la base que soy bastante conformista, bastante confiado y me tienes que dar muy poco para emocionarme. (Vivo en una constante fina línea entre las ostias, la felicidad y las decepciones) Pero cambiar por ti me da pereza. Este año, estaba en un buen momento, los artistas presentados me gustaron, las canciones que participaban en el Benidorm Fest me gustaban (he quemado la lista más que ningún año), realmente no podía elegir un ganador claro, el escenario me flipaba y creía a pies juntillas que esta tercera edición iba a ser el gran salto de calidad, el momento de decir, ¡Viva el Benidorm Fest!

Que los guiones sean más o menos malos es algo que pudo pasar por alto, realmente no empañaría mi felicidad. Que las referencias constantes a Eurovisión me hastíen es algo que puedo soportar. Los presentadores me parece que están graciosos, están divertidos, lo hacen bien. En especial mi amada, admirada y querida Doña Ruth Lorenzo, tiene un arte inabarcable, ella es el orgullo de Paquita Salsa ¡Ella sí es 3,60!

Es innegable que los equipos de los artistas saben a lo que vienen: puestas en escenas muy curradas, props en escena que en épocas “frescas” eran impensables, un escenario que me parece una maravilla…. Tantas cosas buenas que parece impensable que algo fuera a salir mal, pues cariño, sujétame el cubata.

El audio, el puto dichoso audio. En la primera semifinal fue malo, se escuchaba la música muchísimo y a los artistas entre poco y nada, en esta segunda semifinal se escuchaba muchísimo a los artistas y la música bastante bajita. Espero que en la final consigan el esperado equilibrio. No entiendo de esta parte técnica, pero es que realmente todos los años estamos a vueltas con el mismo problema ¿Quizás es que tampoco se escuchan nuestras quejas?

Y luego este año aún siendo todo más currado no luce en cámara, no tenemos el efecto wow de otros años, de puestas en escena que impresionan. Vale que puede restar emoción, porque el año pasado eran solo dos Agoney o Blanca Paloma (para mi Megara eran los mejores), eran las dos apuestas más cerradas, más espectaculares y sabías que podían ir a Eurovisión tal cual. Este año, a día de hoy no hay un claro favorito (del fandom) pero no precisamente por tener muchas propuestas buenas, si no porque tenemos muchas luces y sombras en cada actuación. La que tiene una buena realización, no tiene un buen tema, si tienes un temazo el directo no es bueno y si tienes una buena voz y una buena puesta en escena la canción no es brillante… Y así múltiples combinaciones que parece que este año tengo que ir con aquello que me parece menos malo, pero que a día de hoy no me hace soñar con algo grande en Eurovisión como me pasó el año pasado (Mira, quizás mejor y así me evito el eurodramita).

¡Joder ponerlo por escrito me duele aún más!

Soy pro Benidorm Fest, es más estaba este año más emocionado con España que con el propio IsraelVisión Eurovisión 2024. Parecía tan bonito cuando nos conocimos… Y ahora… Me siento impotente de no saber dar una solución, de no entender porqué no estoy dando saltos de alegría, tenemos las puestas en escena, tenemos las canciones, tenemos los artistas y aún así, no estoy con la euforia de otros años, de sacar pecho a Europa y decirles ¡Mirad el poderío que tenemos en el Benidorm metío! Y me llena de pena, me hace sentirme mal y me frusta (nocta) el no saber el por qué de ello.

Creo firmemente que RTVE quiere hacer las cosas bien, creo que busca un Festival duradero, que guste y que sea referencia. Nos pone las palabras, nos pone la intención, pero al final el trabajo no destaca ni brilla. Tu puedes estudiar meses y meses para un examen, pero si el día de la verdad contestas mal y suspendes, te puedes quedar con el esfuerzo invertido, pero la sensación de fracaso tiñe todo lo demás.

María Peláe – «Remitente»

Ella es la artista de esta edición. Lo visto ayer me pareció absolutamente brutal, de sentimiento, de garra, de fuerza. Ella no vino a pellizcar corazones, ella directamente vino a retorcerlos y darnos una paliza (emocional) en directo. Creo firmemente que para entender su puesta en escena se deben de saber unas lecciones de historia: las trece rosas, la desvandá, los fusilamientos…

Todo se ve en escena, de una manera que mezcla lo sutil pero lo directo a su vez, en un equilibrio mágico. Es arte, un absoluto arte que debería de estudiarse en todas las escuelas. ¿Por qué no la ponemos un lazo y a Malmö? Por que creo firmemente que esto en Europa no lo entienden. Que también te digo, que gana por sorpresa ¡Feliz!

Entiendo perfectamente la elección de María a la hora de presentarse con esta canción, ella vino al Benidorm a dar un golpe sobre la mesa y que España entera pudiera ver no solo que es cañera y gamberra. Sino que ella es ARTISTA. Es muy difícil mantener una actuación con la emoción en alto tres minutos y ella me provocó varios escalofríos y alguna lágrima se me escapó. ¡Brava la Pelae!

Dellacruz – «Beso en la mañana»

Me dio mucha pena que fuera la puntación más baja en todas las votaciones, pero sin embargo, lo vi justo. La canción me gusta mucho, es un tipo de música que escucho y que seguro seguiré escuchando. Y sobre todo porque es el tipo de canción que me alegra un día tontorrón, que la cantas en el coche y te pone una sonrisa.

La puesta en escena estaba chula, pero la faltaba algo, no me transmitía esa alegría, ese buen rollo, ese chute de alegría. Además, es innegable que Dellacruz estaba nervioso, más allá de un directo dubitativo, su expresión corporal y su cara se notaba que estaba tieso.

Me quedo con que es de las personas que más bonito a vivido el Benidorm y es lo que se tiene que llevar de esta experiencia. ¡Y un besazo para él! de mañana, de tarde y de noche.

Marlena – «Amor de verano»

Que llevar esta canción a un directo es muy complicado se sabía desde el momento uno. ¿Qué es un temazo? de los mejores de la edición. La actuación empezó algo temblorosa pero supieron remontar sin problema, en una puesta en escena con una firma Pageo innegable.

Las referencias al saltamontes, a la feria, al verano… Estaba todo. Sutilezas muy bien hiladas (uno es muy de salseos del corazón). Sin embargo en escena quedó muy bien al principio, muy bien al final y el medio se quedó vacío, quizás es el poquito que faltó para su clasificación (para mí lo hubieran estado).

Pero lo bonito del Benidorm Fest es que te sorprenda y te descubra artistas nuevos y Marlena ya serán unas habituales en mis listas de reproducciones porque tienen absolutos temazos.

St. Pedro – «Dos extraños (cuarteto de cuerda)»

Mi top dos de esta edición. La canción es preciosa, es de escuchar en el salón de tu casa con un café, un mantita y ver caer la lluvia. Él canta de maravilla y es realmente guapo, no lo podemos ni negar ni pasar por alto. Tiene unos ojazos. Lo de los ojazos os lo digo porque casi hasta los últimos 30 segundos no se los vemos y encima medio cerrados.

Y aquí empieza mi odisea con esta candidatura. La puesta en escena me parece un absoluto espanto, mala, sin ningún tipo de paños calientes. No puedes estar contando una ruptura, cantando un bolero con un cuarteto de cuerda y tener detrás de ti unas bailarinas que parece que se han quedado por error de la actuación de Marlena, vaya marcha tenían las tías… ¿Llevarían unos cascos para darlo todo? Que ahora están muy de moda esto de las discotecas silenciosas..

Y si hablamos de los primeros planos, el cantando a cámara con los ojos cerrados pues ya me matas, me entierras y todo. Dos extraños creo que se refería a St.Pedro con la puesta en escena porque no se conocen, ni se ayudan y mucho menos desprenden un brillo ganador. Algo que tiene que ser emocionante y bonito me dejó completamente frío y falto de conexión emocional ninguna.

¿Qué tiene pie y medio en Malmö con la puntuación que dio el jurado? Es innegable. ¿Qué es un tema diferenciador de cara a Eurovisión? Desde luego, adoro el riesgo. ¿Qué la puesta en escena es un absoluto esperpento? Está claro. Y aquí entra algo que debería de estar superado y es mi parálisis del sueño: el margen de mejora. Empezaremos con esperar algo que no llega, que no se entiende y un largo etcétera que uno ya tiene unos euroañitos. Pero vamos, hasta el propio cantante dijo que no cambiaría nada en caso de ganar… ¿Me puede no apetecer?

Jorge González – «Caliente»

Voy a confesar una cosita que poca gente sabe, Jorge era mi absoluto favorito en su año de OT. Luego ciertos comportamientos altivos y actitudes a lo largo de los años me borraron esa admiración. Llegó TCMS y me volvió a gustar mucho, volvía a ser mi favorito y esta vez ganó. Es más, se puede rescatar algún tuit apoyando que se presentara al Benidorm Fest.

Él es intenso, una diva, un pedante… Pero eso no justifica las burradas que se le dicen, es así. Cuando salió «Caliente» me pareció un espanto, un maremagno de canciones escuchadas, de clichés, de pretenciosidad que me tiró su candidatura por completo, siempre ha estado en mi bottom.

Ayer confiaba que la puesta en escena podía levantar el conjunto, él en directo es bueno. Pero a medida que iba viendo cosas no entendía nada, pasos de Chanel, cogerle los bailarines y auparle en alto a lo diva máxima, un dance brake que no luce absolutamente nada. Me pareció todo tan pretencioso, tan calculado, tan falso… Y para colmo, la frasecita de que tengo una versión mejor, algo flipante, creo que le faltó decir “Voy a llevar algo nunca visto en Eurovisión”. Luna Ki – voy a morir, voy a matar.

El vocalmente estuvo absolutamente perfecto. ¿Pero ese final? parece que estás cantando, bailando y de repente dices ¡Coño que el jurado también vota, toma un agudo imposible! Es un no, detrás de otro no. ¿Qué gane el televoto? Puedo entenderlo y tener mis teorías ¿Pero el demoscópico? ¿Qué vota? ¿Lo que le gusta o lo que ven para Eurovisión? No entiendo nada y espero que el jurado siga siendo coherente en la final.

Yoly Saa – «No se me olvida»

Era mi protegida de la edición, la canción me parecía una joyita muy poco valorada y confiaba en que en directo pudiera conseguir lo que merecía. Nuevamente mis grandes expectativas me miraron a la cara y me han dicho “No, amorch” Tenemos muy buenas intenciones, muy buenas ideas pero esparcidas en directo, tiradas como quien hace una ensalada en 1 minuto.

Para que me entendáis un arcoiris es bonito porque tiene un orden, una coherencia y todo va en el mismo sentido. Si tu pintas una raya vertical, otra horizontal, de repente una que lo atraviesa todo, pues llega el punto que no sé donde mirar porque estoy sobre excitado visualmente.

No obstante, Yoly tiene que estar muy contenta con la actuación de la noche, es su presentación en España, ahora es seguir el camino para adelante, ella es artista. Y «No se me olvida» una joya musical

Roger Padrós – «El temps»

El sorpresón de la noche, bueno aclaro, el sorpresón positivo de la noche. Roger es de las canciones que menos escuchaba y alguna vez la saltaba, no me escondo. Pero el se dejó de props de todos los tipos de tamaños, colores y sabores, de barroquismo de parafernalia y apostó por la luz, la emoción y el directazo.

Podemos estar de acuerdo que es el que mejor ha cantado de los 16 participantes este año. Presentando una canción que es la sencillez del buen gusto, hasta su mirada en cámara sonriendo me pareció bonita y emocionante. Y realmente estaba en mi quiniela para pasar a la final, que el televoto y el demoscópico se encargó de hundir. Pero era uno de los más justos finalistas de la semi.

Mi enhorabuena querido, fuiste de lo mejor de las dos noches.

Almácor – «Brillos platinos»

Las expectativas estaban por las nubes con lo dicho por la prensa y tenía verdadero pánico que no me gustara (Cris amiga, confiaba en ti). Literalmente estaba temblando antes de que empezara. Pues bien, tengo que decir que a mí no me decepción en absoluto, los efectos en cámara me parecieron novedosos, trabajados y sorprendentes.

El escenario parecía otro, el juego de luces me flipó muchísimo, su manera de estar en el escenario, sus caras, su buen rollismo que atraviesa la pantalla, lo disfrutón que fue y el final de pirotecnia es de lo mejor que hemos visto en esta edición y con bastante diferencia al resto. Quiero ser su amigo.

El gran problema es la voz, no estaba bien vocalmente, es así. Puede dar más clases, se pueden meter pregrabados a saco para evitar carencias, es solventable. Dejemos de pensar que Eurovisión es un concurso de cantar, porque os puedo pasar una lista de 20 canciones con directos perfectos que están en semifinales. En Eurovisión todo suma y la voz es un complemento más del pack final, pero no es determinante.

Cuando la diferencia en el jurado era de 30 puntos con St.Pedro le descarté para la victoria, pero que el televoto y el demoscópico le dejaran quinto es para llorar y no salir de la cama. Con un público joven que ve mucho el Benidorm Fest, con un tipo de música que escuchan a diario, que saque semejante resultado es cuanto menos para reflexionar. Y de gritar APLICACIÓN GRATUITA YA.

Pero bueno, lo mismo tenemos problemas de audio y no se nos escucha…

No sé que esperar el sábado la verdad. ¿Lo mejor? Dar por sentado que ganará St.Pedro y rezar para que las bailarinas se tomen un lexatín antes de salir al escenario y confiar que el clamor popular sea escuchado y tengamos una propuesta escénica completamente nueva para Malmö.

Dentro de las posibles sorpresas que pueden pasar, que «Zorra» de el campanazo de los gordos y llegue a Eurovisión, lo cual, me haría muy feliz. Iría a ser disfrutón y zorrón, no a ganar. Pero nuevamente pediría un pequeño cambio en escena, quiero señoras de bailarinas, no hombres. Y la sorpresa que me haría inmensamente feliz es que Angy fuera a Malmö, soy consciente que no ganaríamos, pero que podríamos luchar por un top 10 es una realidad y me hizo sentir muchas cosas bonitas.

Siendo ciego y no haciendo caso a las puntuaciones que hemos visto, Almácor sin dudarlo ni un segundo. España sonaría a 2024 y ayudaría al Benidorm Fest a avanzar en su cuarta edición desterrando el concepto eurovisivo de una puta vez.

Ahora creo que me veré todo de nuevo, una lloradita para desenredar nudos y nuevamente volver a confiar en que el sábado tendremos algo muy bueno y donde el ganador sea el mejor de todos. Ya sabemos que #SerEurofanNoEsFacil somos intensos e insaciables por naturaleza.