El festival de Eurovisión Junior va cobrando forma y las diferentes delegaciones comienzan a publicar o escoger las canciones que les representarán en Polonia el próximo mes de noviembre.
Uno de los últimos países en seleccionar su candidatura para el certamen infantil ha sido Rusia. La cadena RTR ha decidido volver a optar por una final nacional en la cual un jurado infantil, un jurado adulto y el público a través de una votación online han seleccionado a su representante en Gliwice.
Un total de 10 candidaturas aspiraron a representar a Rusia en Eurovisión Junior, siendo Tatyana Mezhentseva & Denberel Oorzhak los vencedores y por consecuente los representantes de Rusia en Gliwice con la canción “Vremya Dlya Nas (A Time For Us)”.
Considero que había propuestas más originales y llamativas que la ganadora, pero creo que ha sido una elección correcta dentro de la trayectoria de Rusia en las últimas ediciones del festival, siguiendo con la monotonía de las baladas pero aportando el matiz de innovación con la elección de un dueto (desde el año 2010).
La balada es bonita y se me hace muy agradable de escuchar, dado que a pesar de no tener momentos álgidos se diferencia bastante las estrofas del estribillo. No precisa de notas elevadas, lo cual demuestra que se ha apostado por una canción y no por una voz, aunque yo intentaría modificarla con un puente más destacado para hacerla más competitiva de cara al festival, ya que no considero que opte a un puesto en la cima de la tabla de votaciones.
Se trata de una canción que no me recuerda a Rusia en el más mínimo ápice, ya que no tiene esencia soviética ni rasgos que la caractericen dejando de lado el idioma que se impone en el reglamento del concurso. Curiosamente me recuerda mucho más al estereotipo de balada italiana aunque no dote de una producción tan instrumental, quizás este pensamiento me surge no solo por el estilo de la balada sino por la voz del cantante masculino tan rasgada y seca que consigue hacerme viajar hasta la zona de la toscana.
La escenografía no la acabo de entender dado que la estructura utilizada como elemento artístico (muy parecida a la de Hatari) no entona con la canción en sí. Aunque veo cosas buenas como es el caso de la ambientación infantil que me recuerda a una propuesta ‘Disney’ y a que los dos artistas intentan establecer contacto continuamente, aunque deben de mejorar su transmisión de emociones a cámara.
Quiero escuchar la versión final de la candidatura rusa, ya que suelen establecer cambios con respecto a la producción de su candidatura respetando la esencia de la misma.
Deseo la mejor de las suertes a la delegación rusa el próximo mes de noviembre en Gliwice.