La temporada de preselecciones y anuncios oficiales para el festival de Eurovisión 2020 ha finalizado y cada país participante ha publicado sus candidaturas para el certamen musical más seguido de Europa.
Uno de los últimos países en presentar su candidatura ha sido Irlanda, la cual ha vuelto a optar por seleccionar su candidatura de manera interna. Me alegro que escojan su candidatura de manera interna debido a que sus finales nacionales solían ser bastante malas en cuestión de producción, no obstante considero que hacen elecciones poco potenciales y poco competitivas de forma general y me entristece porque es un país con grandes grupos folk, rock y celtas que podrían enviar candidaturas originales y muy sorprendentes al festival.
La candidata seleccionada por la emisora irlandesa ha sido Lesley Roy con la canción ‘Story Of My Life‘.
Me ha sorprendido positivamente la candidatura irlandesa, creo que por fin han apostado por una canción aparentemente sólida, aunque tiene muchos matices que perfeccionar, pero repito van por buen camino y espero que consigan mejorar sus resultados en futuras ediciones aumentando así sus ilusiones y su expectación.
La canción me suena increíblemente bien dado que me recuerda a mi infancia y a los minutos musicales de Disnney Channel, no obstante es una canción más propia del 2010 que del 2020, actualmente queda algo desfasada. No sé si este hecho le jugará a favor o en contra en Eurovisión.
La estructura de la canción está muy bien definida, derrocha energía desde los primeros acordes, los cuales introducen estrofas de manera limpia y ordenada explotando en estribillos cargados de musicalidad y electricidad. El segundo set de la canción sigue el mismo modo de evolución, cerrando el segundo estribillo con un puente muy perfeccionado y pulido dentro de la estructura de la propia composición. Estoy seguro de que en este puente se va a caer el estadio aplaudiendo y saltando.
Tengo un poco de miedo respecto al directo vocal de la artista, ya que su estreno en la RTE tuvo diversos problemas de afinación que considero que podrían venir debido a problemas técnicos en cuanto al sonido, pero a nivel general dejaron mal sabor de boca a un público que acogió la canción de una forma bastante positiva. También considero que la artista es demasiado expresiva y no controla su efusividad gestual. La energía también hay que saber controlarla y dosificarla porque le puede desembocar en problemas de afinación.
La delegación irlandesa ha tenido la suerte (ya sea buena o mala) de competir en la primera semifinal, una semifinal aparentemente compleja que cuenta con gran cantidad de baladas, entre las cuales podría destacar con facilidad si consigue recrear una escenografía visual y energética.
La puesta en escena necesita colores, intensidad de tonalidades, cambios de plano, rapidez y dinamismo, en resumen… EXPLOSIÓN. Si consiguen hacer una puesta en escena extrovertida y sólida podrían hacerse con un pase a la final. Lo más probable es que Irlanda apueste por llevar una banda que simule la orquesta en directo puesto que es lo que más describe las actuaciones habituales de la artista, pero me causa gran expectación en cuanto al concepto escénico dado que lleva tres años que han desarrollado un trabajo diferente al esperado y me ha gustado, es capaz de recrear historias donde no se deja la canción en un segundo plano pero si llaman la atención del espectador para conducir el mensaje y la ambientación de la canción.
Deseo la mejor de las suertes a la delegación irlandesa y espero que este año consigan llegar a la final del festival.